son, los más buscados actualmente. Porque son discretos, porque duelen menos y son más sutiles y sofisticados.
Son la tendencia, y por ello es imprescindible ponerse en buenas manos para lograr el mejor resultado posible, ya que conseguir un trazo fino, normalmente en un tamaño reducido es lo lo más complejo, máxime si hablamos de líneas rectas o geometrías y requiere de mucha maestría y saber hacer.
Hay que tener en cuenta la piel del cliente, la zona, la finura de la línea y el diseño, algo que el tatuador debe saber interpretar para que el resultado sea óptimo.
El tatuador debe saber elegir desde el estilo, las tintas, máquinas, agujas profesionales (long taper, 0’20 0’25 0’30), diseño o espacios. Es por ello que la tendencia a realizar palabras caligráficas en apenas un trazo, todo tipo de diseños más precisos, delicados y finos, se hacen a día de hoy gracias a que el tatuador/a puede pulir su técnica ayudado por la mejora y variedad de materiales (como agujas o máquinas) y por supuesto la experiencia.
A la hora de determinar el diseño final del tatuaje, escoger el área, tamaño y colocación, es esencial acudir a un buen profesional que te asesore correctamente sobre todas las posibilidades. Lo que recomienda Sergio Superfuerza, es tener en cuenta las siguientes variables:
-Cuánto quieres que se vea. «Siempre aconsejo a mis clientes que valoren bien la zona a tatuar, si quieren vérselo más o menos.
-Es clave tener en cuenta cuánto roce va a sufrir el tatuaje, teniendo en cuenta “el envejecimiento y también la fricción de cara al futuro, ya que no es lo mismo tatuarse en un lugar que esté constantemente expuesto al roce, como puede ser una mano o un pie, el cuello, que el antebrazo, pierna, etc…
-El movimiento de la piel con gestos corporales, «simplemente evaluar cómo va a girarse el diseño cuando nos movamos físicamente”.
No obstante, “siempre es interesante preguntar al tatuador. Personalmente, intento ayudar al cliente a la hora de escoger el área y el diseño, ya que todos son fáciles de adaptar a mi estilo”. Dejarte asesorar primero es un gran acierto.
El hecho de que cause menos herida y a priori cicatrice más rápido no quiere decir que podamos ser más laxos en los cuidados después de hacernos un tatuaje de trazo fino. Así que tan importante es comprarnos una buena crema para cicatrizar tatuajes (déjate aconsejar y no escatimes 5 o 6€ en una crema específica).
además debes seguir algunas pautas básicas:
Estudio Fundado en 1997, ubicado en el centro de Valladolid.